El filósofo austríaco Ludwig Wittgenstein escribió que los límites del lenguaje son los límites de la mente. Por ello, si los primeros condicionan mi forma de pensar, esto influirá en el modo en que interprete la realidad y condicionará mis conductas. Las palabras, además, expresan los valores y las cosmovisiones con que las personas interactúan en sociedad. Por extensión, en política, los términos usados también expresan el mundo que construyen, es decir, las herramientas mentales con las que se abren paso en el tratamiento de lo público.
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2 comentarios:
Me gustó la nota, Quique. Le agrego que el así llamado "campo" en realidad eran los terratenientes, y que cuando se habla mal de la política lo que se quiere es evitar es el quilombo, el conflicto social.
¡Ah!, perdón. Eran los terratenientes y los empresarios agrícolas, seguidos por algunos de sus subordinados.
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